"En Japón se dice que las palabras del alma residen en un espíritu llamado "Kotodama" o espíritu de las palabras, y que algunas pueden cambiar el mundo. Todos sabemos que tienen una enorme influencia en nuestra manera de pensar y sentir y, por lo general, las cosas funcionan mejor cuando empleamos palabras positivas." Masaru Emoto
miércoles, 25 de mayo de 2011
No todos son disparates
He aquí un hermoso y coqueto poema de don Juan Antonio Corretjer. Me encanta porque, cuando los dice don Juan, no todos don disparates.
Un día yo te quisí
y siempre te estoy quisiendo
y el amor que te tuví
siempre te lo estoy tuviendo.
(Copla popular del siglo XIX)
Ahora me estoy riendo
Te pusiste mi sombrero.
Y yo te di un beso m’hija.
También te di una sortija.
Fue juntito al limonero.
Fue por la luna de enero
y para siempre entendí.
(Eso te lo dije allí.)
Pero, no; no entendí bien.
¡Ay corazón de lerén!,
¡una vez yo te quisí!
Llevo, en un blanco papel,
siempre una décima escrita,
y siempre tengo una cita
con la muerte y el laurel.
Y siempre con el clavel
voy lo que quiero diciendo,
y siempre me estoy comiendo
el corazón con que adoro,
y siempre, siempre te añoro,
y siempre te estoy quisiendo.
Cosas hay que nunca pierdo:
el trillo de la quebrada,
la amapola morada
y la luz de tu recuerdo.
Yo tengo el olvido lerdo
y el genio como de ahí.
Y yo guardo un pacto
metido bajo la almohada,
y tengo una madrugada
y el amor que te tuví.
Esperé por ti un buen rato.
Me encandiló de tal modo
que me mordió el perro godo
y le hallé tres pies al gato.
¡Ay la carne en garabato
y uno abajo y queriendo!
¡Ahora me estoy riendo
pues todo el tiempo lo cura!,
pero aquel plan de locura,
¡siempre te lo estoy tuviendo!
Juan Antonio Corretjer, Yerba bruja, 1957
jueves, 31 de marzo de 2011
Conjunción "o" entre números
Una buena noticia para García Márquez y para todas aquellas personas que anhelan la simplificación de nuestras normas ortográficas es la eliminación del acento de la conjunción disyuntiva o entre números.
Antes, en nuestros textos, se acentuaba la o cuando se escribía entre cifras. Esto se hacía para evitar la confusión con el 0 y dar pie a una mala interpretación. De esta manera, se escribía 3 ó 4, por ejemplo, para distinguir con claridad esta expresión disyuntiva del número 304.
La Real Academia, en su nueva ortografía, ha determinado que la conjunción o se escribirá siempre sin acento, como corresponde a su condición de palabra monosílaba átona. Esto es así ya que, gracias al empleo de computadoras, su forma y su menor altura frente al 0 no permiten una confusión real en la práctica.
¡Enhorabuena para el gran Gabo!
miércoles, 2 de marzo de 2011
Nueva ortografía: el prefijo ex-
Hasta el momento, el prefijo ex- siempre se escribía separado de la palabra base a la que se unía. (ej. ex novio, ex presidente, ex suegra, ex secretario)
En adelante, se escribirá unido a la base cuando esta sea una sola palabra (ej. exministro, exnovio, expresidente, exsuegra) y separado de ella cuando la base sea pluriverbal (ej. ex primer ministro, ex teniente coronel)
martes, 1 de marzo de 2011
Nueva ortografía
El pasado mes de diciembre de 2010, la Real Academia de la Lengua Española publicó su nueva ortografía. En ella se registran una serie de cambios en la ortografía de nuestra lengua. Poco a poco, iré publicando en este espacio algunos de los cambios más significativos y que mayor "conmoción" han ocasionado en los hispanohablantes.
Comienzo por informar la eliminación de la ch y la ll de nuestro abecedario. Hasta diciembre de 2011, las letras ch y ll formaban parte del abecedario español. La nueva ortografía indica que, en adelante, no formarán parte de nuestro abecedario. Así, de un total de veintinueve letras (29), ahora son veintisiete (27).
Los diccionarios no se ven afectados, ya que, desde 1994, las palabras que comienzan con ch y con ll, se alfabetizan en los lugares que les corresponden dentro de la c y de la l, respectivamente.
lunes, 28 de febrero de 2011
Carta abierta al profesor Gabriel Paizy
Soy partidario de las voces de la calle, más que del diccionario.
Cada loco con su tema, Joan Manuel Serrat
Estimado Prof. Gabriel Paizy:
Reciba un cordial saludo.
No suelo ver su sección en las noticias del canal 11 porque conflige con mi horario de trabajo, pero he tenido la oportunidad de escucharlo en varias ocasiones.
Considero que es muy encomiable y necesaria su labor relacionada con el uso apropiado del español, y creo que hace mucho bien a nuestro pueblo tener en nuestra televisión una sección dedicada a nuestra lengua vernácula. Sin embargo, las veces que he tenido la oportunidad de escucharlo he notado en su discurso cierta tendencia "purista" que lo lleva a descartar, con frecuencia, aquellos usos propios del español de Puerto Rico. Esto, como puertorriqueña y como lingüista egresada del Programa Graduado de Lingüística de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, me llena de profunda tristeza y preocupación.
Justo ayer domingo, 27 de febrero de 2011, estaba usted como invitado en el programa Locas de atar, del canal 11. En un momento del diálogo, una de ellas le indicó que si enzorrá (del verbo enzorrar, recogido en el Tesoro lexicográfico del español de Puerto Rico, de Amparo Morales y María Vaquero), estaba en el diccionario. Usted respondió que no, y le indicó (a mi juicio, con cierto gesto de desprecio en su rostro —vea el video—) que era un puertorriqueñismo, como si el hecho de que fuera un puertorriqueñismo implicara que fuese un uso inapropiado. En otra ocasión, en su sección en las noticias del canal 11, descartaba el término ganga, con el significado que le damos en Puerto Rico, incluso cuando este uso ya lo recoge, en su tercera acepción, la versión más reciente del Diccionario de la Real Academia Española (DRAE).
Deseo clarificar que los puertorriqueñismos no son “malas palabras” ni usos “inapropiados” del español. Son términos que nacen de nuestra idiosincrasia, para responder de manera creativa, pero legítima, a las realidades geográficas, ecológicas, culturales, sociales y económicas que nos circundan. El que no aparezcan registrados en el DRAE no los invalida. Ni la palabra quenepa ni el término tablillero aparecen en el DRAE. Si los dejáramos de usar porque el DRAE no los recoge, estaríamos mutilando parte de nuestra identidad como pueblo y no lograríamos una comunicación eficaz en la comunidad de habla a la que pertenecemos.
Mientras la Academia Puertorriqueña de la Lengua promueve, mediante la campaña Español de Puerto Rico:¡ atrévete y dilo!, el uso de puertorriqueñismos, percibo en usted una fuerte tendencia a descartarlos y a fomentar que no se utilicen. Mientras la Real Academia publica un Diccionario de americanismos, exaltando y celebrando nuestras variadas y riquísimas formas dialectales de expresión, y mientras la nueva gramática ha intentado recoger las gramática y la sintaxis propias de cada pueblo de habla hispana, usted se inclina hacia una postura “purista” y cerrada, que más que enriquecer nuestra lengua, la limita.
Espero que su programa continúe; me parece importante y necesario, pero sería muy agradable escucharlo hablar positivamente del español de Puerto Rico y su aportación a nuestra muy amada lengua española.
Sinceramente,
Patria Borinquen Rivera Reyes